Aquí estamos una vez más, haciendo el regalo de nuestra Instrucción Amense®, en diferentes artículos, frases, versos, símiles, símbolos… y por los medios que están a nuestro alcance. Ahora con ocasión de las elecciones locales de las Ciudades de Hialeah y de Miami, sabiendo la importancia de este momento histórico, y sin ningún otro compromiso que no sea el quedar libres del pecado social (daños), siendo servidores de la JUSTICIA, en Quien murió por ella: Jesucristo.
Recordemos que, desde la Creación del mundo, el ser humano ha seguido la necesidad interna de vivir en sociedad y ha podido lograr contar con lo básico para la vida, Pero es un hecho que etapas tras etapas se han sucedido daños sociales, donde los humanos han traicionado su original inocencia y han llegado a incumplir con el Orden fundamental que nos legó el Padre a través de Moisés (Los Diez Mandamientos de la Ley de Dios), para poder llevar con acierto tan magnífica gratuidad.
Ante éste mal, siempre Dios ha suscitado personas y sociedades que han reaccionado, para establecer los acuerdos del Orden Público, y renovarlo continuamente en su progreso, para que el mundo no se destruya y no se pierda toda la riqueza natural, en manos de personas que llegan a hacer un uso irresponsable, y hasta criminal, de la libertad donada.
Es, pues, un hecho esperanzador, el que el orden natural básico se ha venido manteniendo por siglos en este mundo, superando crisis tras crisis a lo largo de la Historia, donde ha logrado prevalecer siempre la decencia, la moral, la ética, superando traiciones, ejerciendo LA MISERICORDIA del crucificado, y haciendo prevalecer LA CONFIANZA que cada cual necesita del mundo, para satisfacer dignamente, su vida, respetando la vida de los demás.
Las tradiciones valiosas que han funcionado, los valores, los principios, la cordura, el sentido común, toda la estructura social, es el entramado necesario para que la vida fluya y los países, ciudades y pueblos prosperen, crezcan y brinden además el entorno social necesario al ser humano para edificarse y edificar; para crecer y hacer crecer; para ser feliz y permitir que los demás lo puedan ser.
Desde esta perspectiva, invitamos a asimilar el hecho de estar viviendo un momento histórico nunca antes vivido con transformaciones cruciales a todos los niveles y en todos los rincones del mundo, donde se hace necesario retornar a las fuentes seguras para la paz y el progreso.
Así pues, dando continuidad a nuestro artículo anterior, reiteramos que definitivamente llegó la hora de hacer un giro en la política en todas partes. Ante todo, que es importante superar la apatía, la desmotivación o la indiferencia; la falta de interés real para salir a votar a nivel local (en nuestro caso Hialeah, Miami-Dade), porque hay que reactivar el poder del votante, sabiendo que el no hacerlo, o hacerlo con ligereza (sin informarse bien) va a afectar directamente los propios intereses como persona, como padre o madre de familia, como simple trabajador o empresario, en nuestra vida diaria, donde crecen y se forman nuestros menores.
Una motivación especial para los cubanos o hispanos que venimos de países que no están funcionando bien, lo es el crecer en la experiencia de saber que mi persona cuenta en cualquier cambio nacional, y eso es formarse para un futuro, tal vez no muy lejano, donde podamos ejercer nuestros derechos a aportar, al menos nuestro voto, en las decisiones que nuestra nación necesite, una vez liberada del régimen.
Este tema nos da mucho de qué hablar, pero nos limitaremos a ofrecerles ahora como una abreviatura de lo que podemos resumir, para que pueda servir como luz para nuestros hermanos de Hialeah y Miami, en las elecciones locales de este noviembre.
Diremos así que Responsabilidad será la palabra central en el líder, para garantizar que el pueblo vaya por el buen camino, y por ello el pueblo tiene todo el derecho de velar también por exigir esa respuesta a tono con un sano progreso; pero lo fundamental para que un ámbito social funcione, será la armonía en TODOS entre la responsabilidad personal, la responsabilidad familiar y la responsabilidad social, esta INTEGRACIÓN deberá aflorar con libertad y expresarse en la Urnas.
¡A Votar por el Bien Mayor!
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